domingo, 31 de agosto de 2008

El amor en los tiempos del cólera, Gabriel García Marquez

Obra de amor imperecedero, pero un amor a lo Gabriel García Márquez, un amor más allá del sexo y el tiempo; cálido como el Caribe.
La novela transcurre durante más de 50 años. En ella se cuenta la vida de Fermina Daza y Florentino Ariza desde un romance por carta hasta la vuelta a la pasión pasados los setenta. Entre medias, por una parte, el casamiento de Fermina Daza con Juvenal Urbino, dudas, hijos, viajes, infidelidades, peleas y muerte.
Por el otro, sexo, poemas de amor, enfermedades, ascensos, llanto, suspiros y un plan: esperar a la muerte del marido. Pero las dos partes bañadas por el paso del tiempo.
Todo tejido con la gracia del Premio Nobel en un tapiz diferente al realismo mágico.
El año pasado, 2007, se estrenó una película basada en la obra con Javier Bardem en el papel de Florentino Ariza.
Lectura recomendada en especial para todo amante de las historias de amor.

jueves, 28 de agosto de 2008

El horror de Dunwich, H. P. Lovecraft

Colección de cuatro relatos de H. P. Lovecraft: "El horror de Dunwich", "El modelo de Pickman", "El susurrador en la oscuridad" y "El extraño".
A lo largo de los relatos que forman toda su obra Lovecraft (junto con algunos otros escritores) crean un panteón completo de divinidades. Su terror se centra en criaturas horripilantes, mitología y el miedo que todo ser humano tiene a lo desconocido y sobrenatural.
Los cuatro cuentos están escritos en primera persona (se hacen más intensos) con un trasfondo de racionalismo y ciencia.
Pero las similitudes entre los relatos no terminan ahí, en los cuatro se observa una falta de diálogo (en ocasiones la lectura es lenta a causa de ello), un final oscuro y una frase final esclarecedora.
Imprescindible para los entusiastas/amantes del terror y lectura puntual aconsejable para el resto.

Nota: Stephen King es un gran admirador de Lovecraft.

domingo, 24 de agosto de 2008

España, tierra de cojones grandes.

Hace siglos los romanos conocían la Península Ibérica como Hispania; término que "heredaron" de los fenicios. Su significado, "tierra de conejos", reflejaba la gran cantidad de conejos que había por aquella época.
Pero con los años esta denominación ha perdido valor, señoras y señores las cosas cambian. Los conejos ya no son lo que eran y ahora podemos encontrar otra especie (con machos y hembras) más abundante que, aún no siendo oficial, podríamos denominar como "cojonus grandus".
Hace unos días me encontré un espécimen en un espectáculo cómico. Estábamos al aire libre y nos colocamos al final, no había más sillas. La función estaba en marcha, los skets se sucedían, la noche era agradable, todo iba bien.
A mitad espectáculo, dos filas por delante un niño de unos 9 años decidió ponerse de pie sobre su silla.
- Señora, por favor, dígale a su hijo que se siente -el hombre sentado detrás habló casi en un susurro.
- Mire -contestó señalando hacia donde no había sillas, dos filas atrás- allí también están levantados.
La mujer, cojonus grandus, no estaba por la labor; el hombre no volvió a chistar pero el niño se sentó.
Pasados un par de minutos la mujer se levantó, obligó a su retoño a imitarla y se quedaron el resto de la función tapando el escenario al hombre.
La raza cojonus grandus es así, no acepta sugerencias.

miércoles, 20 de agosto de 2008

Cánticos de la lejana Tierra, Arthur C. Clarke

Hace un año recuperé algunos libros de la antigua escuela de mi pueblo; iban a tirarlos. Entre ellos se encontraba este. En un principio no le di mucho valor (incluso lo llegué a olvidar) pero hace poco me interesé por el libro, ¡incluso quise comprarlo!, sin recordar que ya lo tenía; es más, tenía una primera edición de 1987.
En esta obra el autor de "2001. Una odisea espacial" centra su atención en los sentimientos personales.
Arthur C. Clarke estudió Física y Matemáticas en el Kings College de Londres. Eso explica porqué en todas sus obras intenta respetar en todo momento las leyes físicas (límite en la velocidad de la luz, polvo interestelar...).
A lo largo del libro se muestran cuestiones que nos han inquietado durante muchos años: dioses, extraterrestres, derecho sobre razas menos evolucionadas, amor...
Las sensaciones son buenas, aunque en una primera lectura no se aprecia en toda su magnitud los temas de fondo.
Lectura recomendable para los amantes de la buena ciencia ficción sin inventos que rompen las leyes físicas.
Nota curiosa: Mike Oldfield se inspiró en este libro para componer "The Songs Of Distant Earth"

domingo, 10 de agosto de 2008

Susurros del pasado

El matrimonio tenía dos hijos: un chico y una chica. Una estudió medicina, el otro en el campo. Con el tiempo observaron que los detalles de boda parecían eternos, los mimos eran cosa de dos y, aunque se tenían el uno al otro, la casa olía a soledad.
La época de los cuatro había pasado.
Ahora las tardes de lluvia las pasaban recordando. Humos del pasado en estado puro: la niña con su muñeca preferida, el niño con una pelota, los vasos y figurillas rotas que cortaban los juegos... La rueda de la vida había dado más de media vuelta.
En una noche de invierno, de chocolate con churros, decidieron adoptar. Ni un niño ni una niña, ¡ya tenían! Separaron al cachorro de la madre, una madre con tantos que no tuvo tiempo de lamentar la falta, una madre que perdió a sus pequeños como un árbol muerto las hojas.
La mujer volvió a dar el biberón, el padre a pisar orín; ambos estaban contentos. El perro creció, le dolían las encías, ya casi tenía los dientes fuera. ¿El remedio? una muñeca desgastada por el uso. El río del tiempo continuó su curso, el perrito ya sabía traer pelotas pero también romper detalles de boda.
Estaban contentos, volvían a cocinar para tres y el olor a soledad desaparecía junto al de los niños.

sábado, 9 de agosto de 2008

Las cigüeñas y las cuerdas vocales

A la pregunta: ¿Las cigüeñas tienen cuerdas vocales?
La respuesta: No, se comunican por medio de posturas y castañueleos de su pico.

miércoles, 6 de agosto de 2008

El niño cinco mil millones, Mario Benedetti

En un día del año 1987 nació el niño Cinco Mil Millones. Vino sin etiqueta, así que podía ser negro, blanco, amarillo, etc. Muchos países, en ese día, eligieron al azar un niño Cinco Mil Millones para homenajearlo y hasta para filmarlo y grabar su primer llanto.
Sin embargo, el verdadero niño Cinco Mil Millones no fue homenajeado ni filmado ni acaso tuvo energías para su primer llanto. Mucho antes de nacer, ya tenía hambre. Un hambre atroz. Un hambre vieja. Cuando por fin movió sus dedos, éstos tocaron tierra seca. Cuarteada y seca. Tierra con grietas y esqueletos de perros o de camellos o de vacas. También con el esqueleto del niño número 4.999.999.999.
El verdadero niño Cinco Mil Millones tenía hambre y sed, pero su madre tenía más hambre y más sed y sus pechos oscuros eran como tierra exhausta. Junto a ella, el abuelo del niño tenía hambre y sed más antiguas aún y ya no encontraba en sí mismo ganas de pensar o de creer.
Una semana después el niño Cinco Mil Millones era un minúsculo esqueleto y en consecuencia disminuyó en algo el horrible riesgo de que el planeta llegara a estar superpoblado.
(Mario Benedetti: Despistes y franquezas, Madrid, Alfaguara, 1998).