miércoles, 15 de abril de 2009

2001: Una odisea espacial, Arthur C. Clarke

Tenía expectación por el libro, las opiniones la clasifican de espectacular. En el momento, junto con la película, fue toda una revolución y su valor reside en eso: un testimonio de la época. 
Lo comencé como libro de viaje, entre avión, barco y tren por su tamaño y formato. A lo largo de las páginas hay algunos momentos de expectación pero en general se nota su intento de formalismo o su escritura paralela al guión cinematográfico. El resultado es agradable a la vez que extraño; se mezclan situaciones reales con ciencia-ficción pura y dura. 
En sus hojas se tratan diferentes puntos: el inicio del ser humano, el recelo entre naciones, la exploración espacial, la lucha máquina-humano, la vida extraterrestre...
Al final me pasó igual que con "Cánticos de la lejana Tierra"  la encuentro entretenida pero no será una de mis obras favoritas. 

viernes, 10 de abril de 2009

Pequeños cambios

Entró, todo parecía estar en su sitio, nada, en apariencia, había cambiado. Las calles tenían la misma forma, la panadería seguía allí, los coches de los vecinos estaban, más o menos, en el trozo habitual. Se colocó en medio de la vía y miró a ambos lados, seguía viéndose el final oscuro. Las farolas sólo iluminaban el asfalto.

El viaje había sido menos largo de lo esperado pero muy cansado. Durante un periodo de tiempo, diez días, la extradición se había detenido. La cama, su cama...

La mañana llegó tranquila, como siempre, hacía sol. Se levantó, el pueblo estaba desierto. La mayoría de gente se había marchado de vacaciones, quizá algunos estarían en las costas de las que procedía. Por el rabillo del ojo vio el primer cambio. Un edificio en obras perpetuas, ya tenía estructura.

Fue a por el pan, un nuevo cartel de publicidad, camuflado de papelera, rompía el centro de la plaza. Cerca de la panadería, una parafarmacia había mutado a cafetería. Por lo menos la dependienta seguía siendo la misma. En otro rincón había florecido una tienda de hilos.

Respiró hondo, el río, aunque de igual nombre y trazado, contenía diferente agua.

martes, 7 de abril de 2009

Los Dones, Ursula K. Le Guin

Tras la saga "Historias de Terramar" estaba un poco cansado de esta autora, en especial Tehanu. El primer volumen de "Los Dones" fue un regalo y me enganchó desde el principio.
En los libros de Ursula K. Le Guin el/la protagonista no suele tener un único objetivo; más bien se dedica a contar las pequeñas aventuras de su vida cotidiana. Claro está que estos personajes no son comunes, tienen alguna característica importante y, por tanto, sus pequeñas aventuras son increíbles. 
En esta ocasión los protagonistas son un niño y una niña con, al igual que sus familias, unos dones. De ellos hay varios tipos y cuando más destructivos más poderosos se consideran. La muchacha Gry tiene el don de llamar y tratar con los animales. Orrec, el muchacho, de deshacer lo que señala, ya sea un nudo, un árbol o el esqueleto de un ser vivo (incluido un humano). 
A lo largo del cuento, veremos evolucionar a los niños, pasar de ser niños a adolescentes con todas sus preocupaciones. En cierto modo me recordó a Ana María Matute.
Este libro tiene algo especial, algo que atrapa al lector hasta el final. ¿Será que está escrito en primera persona?. Recomendado para adolescentes/adultos que aman la fantasía. 

domingo, 5 de abril de 2009

Palabras, flores y espinas
























Hay una zona de recolección donde van todas las palabras. Es un vertedero dividido en dos partes, una llena de amargas sílabas hijas de lenguas biperinas, otra con las musas del viento. El cerebro es el organizador y realiza la selección dependiendo de muchos factores.

Uno de ellos son los labios que las formulan, si la carne unidas a ellos es agradable van a la zona de bosque verde lleno de flores. En cambio, si pertenece a un sujeto sombrío las letras caen en una espiral de recuerdos dolorosos hasta que se componen de púas y espinas que envolvemos en otras palabras despectivas.

Lo curioso del caso es que cada cerebro las ordena de una forma, las palabras son las mismas pero el organizador difiere. Hay casos en que las hijas del viento bailan durante horas o días en un lugar oscuro a la espera. En ocasiones ven la luz y se marchan lujuriosas al bosque, en otras se quedan ciegas esperando, siempre esperando a una sonrisa que les brinde luz o un desafortunado gesto que las condene.

Pero el organizador es astuto, no deja aflorar en los ojos la condena y los labios no ven el camino que siguen sus palabras. Así se producen las puñaladas en el corazón. Otro de los machacados injustamente, uno de esos que no siente rencor aunque las piedras/palabras caigan sobre él. Pues el corazón manda pero el cerebro interpreta.

jueves, 2 de abril de 2009

Brisingr, Christopher Paolini

Tras un parón de varios años  nos llegaba el tercer título de la saga "el legado". Con ella lo que era una buena trilogía pasa a estar compuesta por cuatro libros y eso se nota; además de dejar una sensación agria por esperar un final que no se produce.
Más de la mitad del tercer libro es pura paja, nada interesante y muy aburrido. En ella Eragon, el protagonista, da vueltas y más vueltas sin casi sentido en el mundo que ha creado Paolini. La frase que lo resumen es: "Necesito una espada".
La única parte que se salva es la final, con la que debería comenzar el libro. 
Por si esto fuera poco las fuerzas no estan bien medidas, lo que debería ser fácil con las descripciones anteriores no lo es y lo difícil pasa a superarse en un momento contradiciendo ideas anteriores. El broche de oro es la magia, en una colección en que se espera magia a raudales esta brilla por su ausencia.
Así, una saga ya criticada por su originalidad, pero aceptable ha pasado a ser, a la espera del cuarto libro, una gran decepción.